Ella.- ¿pero qué te pasa? Parece que estas como drogada, no te entiendo, no
Pareces tú. ¿En serio crees que serás feliz con él?
Yo.- ¿sabes qué? Me vale madres, tienes razón me siento como en medio de
Los efectos de una droga, de una pinche droga hipnótica que hace que vea
todo como si estuviera soñando, como si esto no fuera real.
Y la verdad es que es la misma sensación que tuve antes, pero esa vez me dio
tanto miedo estar soñando que hice hasta lo que nunca creí hacer con tal de
"despertarme" ¿y que logré con eso? Desperté en una maldita pesadilla llena
de lagrimas y dolor, llena de angustia y de incomprensión, dejé de amarme y
ya no pude amar a nadie más, huí de él porque me recordaba mi error y no
Pude soportar eso, él me perdonó, pero yo no pude hacerlo.
Así que ahora te lo digo: si este es un sueño, bienvenido sea, es un sueño
hermoso, irreal y esta vez no quiero despertar, quiero vivir en esta
Fantasía, gozarla al máximo, embotarme los sentidos de tanta felicidad y
realmente me vale madres lo que venga después porque solo hay dos opciones:
Despierto y sufro mucho, pero en el fondo siempre queda el recuerdo de lo
feliz que fui
o sigo así, viviendo en medio de este no cuento de hadas y ese, ese sí que sería un final feliz
sábado, 27 de marzo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario